Nakht, un avispado niño del Egipto antiguo, se traslada con su familia a vivir a la gran ciudad de Menfis, donde su padre ha encontrado trabajo como escriba. Allí va descubriendo para los jóvenes lectores, el esplendor de la vida en el Egipto faraónico. Sus costumbres alimenticias y médicas, la estructura social, las divinidades, las fiestas y ritos, la organización gremial, el día a día en la escuela para aprendices de escriba, las ciudades de los muertos son descritas de forma vibrante en el diario de Nakht. Además, no falta la intriga y el misterio, cuando Nakht y su hermana topan con una banda de saqueadores de tumbas.
